Leyendo y viendo magníficos comentarios y fotografías sobre Cuba en la actualidad, no podemos menos que reflexionar en el sentido de que hasta que grado tendrán razón los cubanos, o más bien Fidel castro, de no haberse entregado a la inversión extranjera, específicamente hablando de la inversión estadounidense.

Y conste que no soy comunista y mucho menos socialista, pero al ver en fotos esas preciosas playas vírgenes por cierto de esa isla, no podemos menos que comparar con las antes hermosas playas que les pertenecían a los sudcalifornianos, antes claro de que el progreso, entre comillas, nos alcanzara.

Quien no puede menos que recordar aquellas hermosas playas de Los Cabos, como la Santa María, por ejemplo, que eran disfrutadas por los josefinos, los paceños y todos los sudcalifornianos y que ahora están cerradas y prohibido el paso a mexicanos, o solamente que tenga uno para pagar miles de dólares por unos días de disfrute.

O las playas de Ensenada de Muertos, que ya están cerradas también para los mexicanos y no se diga para los paceños, además de los casos recientes de Costa Baja y El Mogote, que ya están cerradas para los mexicanos y los sudcalifornianos, y que estarán disponibles solamente para los grandes magnates que puedan pagar por una noche de 200 a 300 dólares con el derecho de disfrutar desde luego de las playas que antes nos pertenecían, entre comillas también.

Nada mas hay que señalar lo que sucede en Los cabos, cuando no se pueden acceder a ninguna playa, salvo la de El Médano, que ya se encuentra en disputa entre los grandes hoteleros y que seguramente de ganar cualquiera de ellos, serán cerradas al acceso de los mexicanos y de los sudcalifornianos.

Luego entonces, la reflexión que hacemos es en el sentido de que los cubanos, salvo en las playas de los hoteles desde luego, sí gozan de sus playas, bien bonitas por cierto, que de haber seguido la influencia gringa, ya estuvieran ahí edificados grandes hoteles de grandes cadenas, con acceso prohibido para los cubanos en este caso.

Luego viene el cierre de las playas de Balandra y El Tecolote, en donde están programados grandes desarrollos turísticos, que contribuirán al progreso, entre comillas, ya que solamente beneficia a unos cuantos estas inversiones, principalmente a extranjeros.

Y seamos claros, al señalar progreso entre comillas, pues las grandes inversiones solamente benefician a unos cuantos, además de que los mejores empleos, solamente se dan a extranjeros, dejando solamente los trabajos de mozos o camareras a los locales, y a veces ni eso, pues dependiendo el grado de servilismo y explotación de que se dejen, estos empleos son también entregado a gente  del interior del país, con grandes necesidades y hasta porqué no decirlo, con hambre, lo que no tienen los sudcalifornianos, que son dignos, no flojos como los catalogan los explotadores.